"ASÍ COMO EL HABLAR IMPRUDENTE CONDUCE AL ERROR,

TAMBIÉN EL SILENCIO IMPRUDENTE DEJA EN EL ERROR A LOS QUE TENDRÍAN QUE SER INSTRUÍDOS"

(Papa San Gregorio Magno - Regla Pastoral, II, 4).

"DEBEMOS EVITAR EL ESCÁNDALO. PERO SI POR EL ESCÁNDALO SE PRODUCE LA VERDAD,

ANTES QUE ABANDONAR LA VERDAD, SE DEBE PERMITIR EL ESCÁNDALO"

(Papa San Gregorio Magno - Homilías sobre Ezequiel, VII. 5).


viernes, 10 de noviembre de 2017

CUANDO LOS ALUMNOS FRUSTRAN / DESALIENTAN / CANSAN A SU INSTRUCTOR

Hace unos días, una persona me dijo: “He leído muchas notas de su Blog, y por lo que entiendo, hay unos cuantos Profesores de Artes Marciales que NO son serios o NO enseñan su Arte Marcial de la manera correcta”. 
Yo contesté: “Hay muchos Profesores buenos y serios en muchas Artes Marciales, pero lamentablemente hay una cierta cantidad que no los son. 
 Hay Profesores que dejan de lado la formación física, mental y espiritual del alumno… para sencillamente “venderles un producto atractivo y entretenido”… que finalmente NO sirve ni para defenderse ni para mejorar como persona. 
Y hay algunos que se van hacia el lado esotérico… mucho misticismo… mucha ceremonia extraña… mucho entrenamiento misterioso en lugares alejados… que incluso pueden poner en peligro la salud de los alumnos. 
Los alumnos de ellos quizás los vean como un ***Gran Maestro***… pero en realidad actúa más bien como el líder de una secta… buscando la obediencia ciega y la sumisión incondicional de sus alumnos… para satisfacer su propio ego. Por eso escribo estas notas, para ayudar a los lectores a diferenciar a los Profesores buenos y serios de los otros”. 

Pero no solo hay Profesores puede hacer que su clase de Artes Marciales NO sea beneficiosa para sus alumnos… 
TAMBIÉN hay alumnos que NO AYUDAN a que su clase sea buena y provechosa. 
Veamos… 

Cuando un miembro Dan de cualquier estilo empieza a enseñar a su propio grupo de alumnos, él tiene todas las ganas y el empuje para encarar este nuevo paso en su “aprendizaje” marcial… y a la vez todas las dudas derivadas de su falta de experiencia. Cuando ya tiene un grupo de alumno estable, el buen Instructor pone “todo su cerebro y corazón” en la tarea de enseñar y formar a SUS alumnos. Y cuando éstos mejoran cada día, el Instructor siente una gran satisfacción. 

Pero, con el paso de los años y de los alumnos, el Instructor empieza a experimentar “reveses” y “frustraciones”: 
- alumnos que no aprenden “como debieran”… generalmente por falta de interés o de disciplina de los mismos alumnos. 
- alumnos que “prometían mucho”… pero que luego dejan la práctica… a veces porque “perdieron el interés”… a veces porque “encontraron algo que les gusta más”. 
- alumnos con buena actitud e interés… pero que, por factores externos (estudio, trabajo, se mudan a otra ciudad, etc.), dejan de entrenar. 
- alumnos que no entienden la visión moral y marcial de su Instructor… y que sólo se interesan la parte “superficial” o “divertida” de la práctica. 

Estas situaciones son “naturales”… son parte de la vida… y como hay otros alumnos que siguen con mucho interés y compromiso las clases… el ánimo del Instructor no decae. 

SIN EMBARGO, en algunos grupos de alumnos se puede producir un “descenso general del nivel y compromiso”. No pasa de un día para el otro… pero un día el Instructor / Profesor / Maestro mira a su grupo y se pregunta: “¿Esto está funcionando?” 

Ese día, el Instructor / Profesor / Maestro se dá cuenta que la cantidad de energía y tiempo que les dedica en clase no tiene los frutos esperados

Entonces él piensa, ensaya nuevas estrategias de enseñanza, agrega actividades complementarias, se acerca más a los alumnos… para volver a motivarlos. 
Quizás estos cambios funcionen y el nivel del grupo mejore… pero, a veces, por más que el Instructor / Profesor / Maestro se esfuerce… el grupo, o al menos la mayor parte de ellos, sigue en un nivel BAJO de compromiso y energía, de conocimientos y habilidades. 

Si ese grupo antes estaba altamente motivado y ahora ya no lo está… existe la posibilidad de volver al estado anterior: una charla abierta y franca del Instructor / Profesor / Maestro con sus alumnos podría servir para determinar las causas y encontrar los cambios que se deben realizar para volver a mejorar. 

Pero quizás lo anterior TAMPOCO funcione… y entonces los alumnos siguen sin demostrar interés en mejorar, no se esfuerzan en avanzar ni parece que quisieran aprender algo más
- Parece como si los alumnos creyeran que ese nivel BAJO de habilidad y conocimientos que demuestran FUERA BUENO… o al menos SUFICIENTE. 
- Parece como si esos alumnos creyeran que ese nivel BAJO de compromiso y esfuerzo, de habilidad y conocimientos (“Arte Marcial LIGHT”) fuera lo que se hace en un “verdadero Arte Marcial”. 

Recordemos que un Arte Marcial Tradicional es heredero de lo que entrenaban los antiguos guerreros orientales para ir a batallas a “VENCER o MORIR” para defender a su país, su pueblo y su Señor o Rey. 
Si bien es cierto que hoy no peleamos a “VENCER o MORIR”… sino que “bajamos un poco el nivel de exigencia”… para que más personas puedan entrenarlo… TAMBIÉN es cierto que NO podemos rebajarlo tanto que se convierta en “un partido de fin de semana entre amigos” o un “Juego de la Mancha”, “la Mancha”, “la Tiña”, “las Pilladas”. 
Si yo pateo una bolsa medianamente dura, la bolsa debe “hundirse bastante” en el punto del impacto… tal como lo haría el cuerpo de un agresor del cual yo me esté defendiendo. Los vídeos siguientes son de dos alumnos míos cinturones verdes, que están calentando antes de la clase.

Si yo rompo una tabla de madera, NO puedo conformarme con romper UNA tablita de 1cm de espesor (por más que haya dado 5 vueltas en el aire antes). Lo mínimo que puede considerarse ROTURA / ROMPIMIENTO es romper una tabla de 2,5cm de espesor… que equivale a romper un costilla. 
Aclaración técnica: mi alumno (vídeo de la izquierda) no patea desde la posición Kee Mah Ya Seh (jinete) sino desde una posición mucho más alta, para acercarse más a lo que puede usar en una pelea real... 
que es la situación donde REALMENTE NECESITARÁ romper dos maderas de 2,5cm de espesor, juntas. 

Pero claro… hay grupos donde la mayoría NO tiene ese interés… para ese tipo de alumnos, hacer “sonar” la bolsa con “pataditas” que apenas la mueven, romper “tablitas” de 1cm de espesor… hacer formas sin energía ni interés… y dar grititos y saltos por todo el Gimnasio… les resulta suficiente. 

Esto suele verse en Colegios donde los niños tiene una clase semanal de “arte marcial”… aunque la mayoría lo toma como algo “obligado”... algo que si los divierte está bien… pero OBVIAMENTE “no les interesa realmente”.

El tema es ¿Cómo ve a esta clase el Instructor / Profesor / Maestro? 

Hay dos posibilidades: 
1 – si el Instructor / Profesor / Maestro quiere mantener ese grupo a toda costa, generalmente por necesidad económica, lo puede “llevar lo mejor que pueda”… aunque con el tiempo seguramente entrará en un ritmo de clase tipo “piloto automático”: los alumnos reciben lo mínimo… el Instructor / Profesor / Maestro les dá lo mínimo… y roguemos que DIOS ayude a esos alumnos si algún día necesitan aplicar lo que aprendieron en una pelea real. 

2 - quizás se llegue al punto que el Instructor / Profesor / Maestro se sienta tan cansado / frustrado / desilusionado de ese grupo… que decida no darle más clases… a veces tratando de encontrarse “un reemplazante” para que siga con el grupo… o a veces, lamentablemente, cerrando el grupo. 

Si vuelven a leer el principio de la nota (sobre cómo empezó cada Instructor a dar clases), entenderán que el final indicado en las últimas líneas “es el final de un MUY LARGO camino de decepción que siente el Instructor / Profesor / Maestro”. 

¿Qué se puede hacer para remediarlo? Cuando se llega a este punto, el Instructor / Profesor / Maestro ya hizo todo lo que estaba en sus manos… si hay una solución, estará ahora en manos de los alumnos que quieren practicar SERIAMENTE… y son ellos quienes deberán hablar con su Instructor / Profesor / Maestro y decirle que quieren dejar esa práctica “light” y sin compromiso… y pasar al camino del VERDADERO Arte Marcial. 

Seguramente sólo un puñado de alumnos podrá hacer ese pedido… la mayoría seguramente no lo hará (por algo se llegó a esa situación)… 
pero si un buen Instructor / Profesor / Maestro recibe un pedido así… sólo por ese puñado de alumnos seguirá enseñando como debe ser. 

¿Y los otros… la mayoría que no quería cambiar? Se adaptarán… o se irán a “jugar al arte marcial” a otro lado… o el Instructor / Profesor / Maestro se irá de ese lugar con el puñado de alumnos que quieren algo mejor, a otro lugar donde pueden entrenar seriamente. 


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ADICIONAL: Cada vez que escribo sobre “alumnos”, muchos lectores piensan en personas que usan cinto de color, pero no en practicantes Danes. Quizás incluyan como “alumnos” a los Danes que NO enseñan a sus propios alumnos. 
Y lamentablemente, cuando ALGUNOS Danes comienzan a enseñar, ellos erróneamente creen que ya NO son "alumnos". 
ALGUNOS de ellos creen que ya no deben asistir a las clases de su propio Profesor para aprender, sino que tienen que dedicarse a enseñar a “sus” alumnos. 
¿Seguir entrenando?... 
cuando yo llegué a 1er Dan… iba cada mes a clase con Danes de nivel Superior (no mi Instructor) y cada 6 meses tomaba clases con el Maestro. Para todas y cada una de esas clases… yo me preparaba de la mejor manera posible… para que el Maestro estuviera muy contento de lo que yo había aprendido y mejorado. Al día de hoy lo sigo haciendo… 
Sin embargo, para los Danes que creen que “ya no son alumnos”… la idea es entrenar es sólo “para quedar bien con el Maestro”… y así pasar el tiempo para presentarse al examen de 2º Dan (o de 3º o 4º Dan). 

Pensar así es un grave error, en un Arte Marcial serio NADIE deja de ser “alumno". 
Incluso, el Gran Maestro / KWAN JHANG NIM puede y debe seguir entrenando, investigando y aprendiendo. 
TODOS LOS DEMAS, DESDE LOS 8º DANES HASTA LOS CINTOS BLANCOS SOMOS ALUMNOS”. Todos los Danes son y seguirán siendo alumnos. El Maestro 7º u 8º Dan debe entrenar y aprender frecuentemente con el Gran Maestro, el Maestro 5º Dan debe entrenar y aprender frecuentemente con el Maestro 7º Dan, y los Danes de cada Asociación debe entrenar y aprender frecuentemente con sus respectivos Maestros y Danes Superiores.

Este tipo de Instructores “confundidos” son fuente de frustración para Profesores / Maestros que deban darles clases, cuando estos Profesores / Maestros son del tipo que NO olvidan lo que un verdadero Arte Marcial es… y que no entran en el circuito “por dinero, cualquier cosa”. 

Y si bien es más raro que un Profesor deje de darles clases a los Danes , sobre todo si son sus alumnos directos… igualmente sería mejor que esos Instructores “confundidos” sean más humildes y se esfuercen más en entrenarse y aprender…

por su bien y el de su estilo.

por SBN Ricardo A. Longinotti (7º Dan - TANG SOO DO MI GUK KWAN - ARGENTINA)
NOTA: por cualquier duda o necesidad de mayores detalles sobre éste u otros temas de TSD, puede enviar un e-mail a tsdlonginotti@hotmail.com o dirigirse personalmente a las clases de TSD MGK, en los días y horarios especificados en el título de este Blog.

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