"ASÍ COMO EL HABLAR IMPRUDENTE CONDUCE AL ERROR,

TAMBIÉN EL SILENCIO IMPRUDENTE DEJA EN EL ERROR A LOS QUE TENDRÍAN QUE SER INSTRUÍDOS"

(Papa San Gregorio Magno - Regla Pastoral, II, 4).

"DEBEMOS EVITAR EL ESCÁNDALO. PERO SI POR EL ESCÁNDALO SE PRODUCE LA VERDAD,

ANTES QUE ABANDONAR LA VERDAD, SE DEBE PERMITIR EL ESCÁNDALO"

(Papa San Gregorio Magno - Homilías sobre Ezequiel, VII. 5).


martes, 23 de marzo de 2010

HONOR : El “ladrillo” básico del edificio de Tang Soo Do Mi Guk Kwan






por Kwan Jhang Nim Charles Ferraro


Reprinted from "Mi Guk Kwan News" Otoño 2001

La gente piensa que TANG SOO DO MI GUK KWAN es, en términos generales, un arte Marcial. Pero más importante que eso, TANG SOO DO MI GUK KWAN es una disciplina. La palabra disciplina significa, para muchos individuos, un conjunto de preceptos difíciles de cumplir y de visiones desagradables. Para el artista marcial serio esto no es así, porque sin disciplina no puede haber arte marcial.

Disciplina según lo definido en “Webster’s Dicctionary”, es: "Un entrenamiento o ejercicio sistemático para lograr desarrollo y control de las facultades mentales, morales y físicas. Orden en el comportamiento. Obediencia a la autoridad correctamente constituida". Las disciplinas Marciales son multifacéticas. Disciplina puede referirse a su compromiso personal con el entrenamiento. Puede también referirse a la determinación de un artista marcial para demostrar el comportamiento apropiado hacia su Grandmaster, los seniors, los instructores, los alumnos menos avanzados, la escuela o aún el arte en sí mismo. La disciplina puede también ser demostrada simplemente haciendo las cosas correctas en el momento correcto. El practicante de TANG SOO DO incorpora a su vida el principio de “Hacer lo correcto” a través del concepto de Honor.

El honor es la piedra angular de la práctica de TANG SOO DO y de la forma de vida "MOO DO" (vía marcial o militar). ¿Por qué TANG SOO DO forma practicantes honorables? Para comenzar, porque es una parte inherente de nuestra disciplina y es un requisito práctico de nuestro arte. Vivir con honor es un camino muy enriquecedor y eficaz para vivir. Vivir de otra manera es sencillamente cobardía.

Los estudiantes modernos aprenden técnicas peligrosas y los estudiantes avanzados son los combatientes más aptos y mejor entrenados dentro de sus comunidades. Debido a esto, los practicantes de TANG SOO DO que actúan sin honor pueden convertirse en personas peligrosas. Abusando de sus capacidades y fuerza, pueden hacer gran daño a las personas no entrenadas en artes marciales. Sin el fundamento moral que el honor proporciona al artista marcial, éste puede convertirse en una persona extremadamente volátil y peligrosa. En mi opinión, es el honor, más que cualquier otra cualidad, la que separa al artista marcial de los simples matones o peleadores.

En el código japonés de "Bushido", se dice que un guerrero debe demostrar tres cualidades: Lealtad, Conducta Correcta y Valor. Estos tres conceptos en el entrenamiento moderno TANG SOO DO se convierten en: Obligación (ui-mu), Justicia (chong-ui) y Coraje (yong-gi).

La obligación está en la raíz del honor en todas las artes marciales, y aceptar la propia obligación (ui-mu) es la base fundamental que hace honorable al artista marcial. Este principio no se limita a las simples obligaciones financieras, o a los deberes específicos asignados por sus superiores, aunque ambas cosas también deben cumplirse. En el corazón de la obligación están todas las responsabilidades inherentes a la sociedad humana. La obligación, tal como se encuentra en el entrenamiento del moderno TANG SOO DO, se puede describir perfectamente como el requisito moral para satisfacer nuestro deber. Ocupar un lugar en la sociedad
implica aceptar un sistema básico de relaciones entre sus miembros, dónde hay tanto derechos como obligaciones. Los instructores entrenan, educan y se ocupan del desarrollo marcial de sus estudiantes. Como contrapartida, los estudiantes deben obedecer, proteger y sacrificarse por sus superiores.

El artista marcial honorable debe preocuparse por los otros. Cada uno respalda a sus compañeros y, como contrapartida, sabe que es también respaldado por ellos, si estos son honorables. Todos estamos moralmente obligados a demostrar y proyectar solamente los principios más elevados, ya que nuestras conductas y acciones representan a nuestros seniors, nuestros instructores, nuestra escuela y nuestro arte.

La justicia descansa sobre el honor, porque ninguna obligación cumplida es honorable si en el acto de cumplirla se produce una injusticia. Justicia es conocer la diferencia entre correcto e incorrecto. Cuando uno está constantemente atento en hacer todo correctamente, después el honor se convierte en un hábito y nos encontraremos que ni siquiera podemos considerar la posibilidad de elegir alternativas incorrectas. Por lo tanto, es importante que los practicantes de TANG SOO DO, antes de hacer algo que pueda obligarlos con alguien, deben considerar si esa persona es honorable. Si no es así, pueden encontrarse luego frente de un dilema moral, cuando les exijan que cumplan su deuda u obligación haciendo algo que los deshonre. Para ser honorable un practicante de TANG SOO DO debe examinar siempre sus obligaciones a la luz de la justicia.

Además, un practicante de TANG SOO DO debe tener el valor de cumplir con sus obligaciones. El Coraje es la virtud que se asocia más a menudo con las artes marciales. La misma naturaleza de las artes marciales la exige. Yong Gi es una cualidad honorable. Sin embargo, el Coraje necesario para vivir una vida con honor es diferente del coraje que se espera de los guerreros en una batalla. El Coraje moral es la determinación que un individuo toma para hacer lo que es correcto, no importa cuál sea el costo personal para él. Si bien este tipo de demostración de Coraje no es tan dramática como el demostrado en los enfrentamientos físicos, esta es la clase de Coraje que más a menudo deberá demostrar un practicante de TANG SOO DO en su vida diaria. A menudo quedamos en una posición tal que nuestro propio honor depende de que tengamos el coraje necesario para hacer frente a nuestras obligaciones en forma responsable. El Coraje moral es un ingrediente crucial para que un practicante de TANG SOO DO pueda mantener su honor intacto.

Hay un más punto a entender sobre el Coraje. Tener valor no significa no sentir miedo. El miedo es una emoción humana natural y la gente honorable lo experimenta de la misma forma en que lo hace la gente sin honor. Lo que determina su nivel de Coraje es cómo usted maneja el miedo. El practicante de TANG SOO DO enfrenta sus miedos, consigue el control de sí mismo y hace todo lo que debe hacer.


Traducido por SBN Ricardo A. Longinotti (6º Dan - TANG SOO DO MI GUK KWAN - ARGENTINA)

NOTA: por cualquier duda o necesidad de mayores detalles sobre éste u otros temas de TSD, puede enviar un e-mail a tsdlonginotti@hotmail.com o dirigirse personalmente a las clases de TSD MGK, en los días y horarios especificados en el título de este Blog.

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